
Emocionado hasta las lágrimas, Mateo Dzul Couoh se reencontró ayer con su esposa, Loida Chan, e hijo Mateo, quienes acudieron a recibirlo al aeropuerto de Mérida con globos y un cartel de bienvenida.
‘La verdad, me encantó volver a verlos y abrazar de nuevo a mi esposa e hijo, estoy muy feliz, realmente no me esperaba ser recibido de esta manera tan alegre y ver cómo ha crecido mi hijo Mateo, que era un pequeño cuando me fui en busca de trabajo a Estados Unidos y hoy está en quinto de primaria’, declaró.
Y qué mejor regalo para su hijo que poder abrazarlo en un día tan especial como el Día del Niño que fue celebrado este miércoles 30 de abril.
Mateo Dzul dijo que es originario de Kancab, comisaría de Tekax, y pese a que le iba muy bien en San Francisco, California, decidió regresar a su tierra natal, porque su esposa prácticamente se quedó sola por el fallecimiento de sus suegros y no podía soportar que su familia se quede sola, sin nadie que la ayude a trabajar en la parcela y la colonia de abejas de sus padres políticos que fallecieron, primero su suegro, al poco tiempo que emigró a Estados Unidos, y luego su suegra hace un año.
Por esa razón decidí regresar para quedarme, porque realmente extrañaba a mi familia.