En medio de dos realidades distintas, finalizó una nueva audiencia del caso Fabiola y Ángel, jóvenes fallecidos tras haber sido atropellados el pasado 29 de abril en la zona Nororiente de Mérida. Luego de que los fiscales y el asesor jurídico de Santos Enrique, padre de Ángel, demostraran que existe una variación en las condiciones, la juez Pamela Cetina Bautista, determinó la prisión preventiva justificada para el presunto responsable.
Lo anterior, considerando que existe un riesgo de sustracción de la justicia por parte del implicado, quien a partir de esta tarde quedó detenido, y en espera de que la autoridad correspondiente le retirara el brazalete electrónico, que formaba parte de las extintas medidas cautelares, las cuales generaron indignación entre los yucatecos.
Fue en la sala 1 del Centro de Justicia Oral de Mérida que se desarrolló la audiencia, con una duración superior a las dos horas. La defensa del acusado, no logró presentar argumentos sólidos que sostuvieran la teoría de que no existía un riesgo de fuga. Además, se indicó que a pesar de que en las audiencias realizadas previamente se mencionó la póliza que cubriría lo gastos, hasta el momento no existe garantía de eso, e incluso hay dudas al respecto.
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¿Cuáles son los delitos?
De acuerdo con el representante legal de Santos Enrique, padre de Ángel, durante la audiencia del pasado viernes 2 de mayo, se presentaron tres delitos: homicidio cometido por culpa (en el caso de Ángel), lesiones que ponen en peligro la vida (en el caso de Fabiola) y daño en propiedad ajena.
Sin embargo, la situación cambió luego de que Fabiola perdiera la vida en días reciente. En ese sentido, la expectativa es que el implicado enfrente dos homicidios por culpa, aborto cometido por culpa (presentado en la reciente audiencia), así como daño en propiedad ajena, también cometido por culpa.
