Mientras funcionarios de todos los niveles -desde el gobernador Joaquín Díaz Mena hasta diputados y magistrados- cumplieron con su deber ciudadano en las históricas elecciones judiciales, la alcaldesa de Mérida, Cecilia Patrón Laviada, brilló por su ausencia. Ni en redes sociales ni mediante su equipo de comunicación hubo explicación alguna que justificara su omisión.
Durante la jornada pasaron por las urnas el gobernador, Joaquín díaz Mena, quien votó en Mérida; el diputado Wilmer Monforte Marfil, presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso del Estado, ejerció su derecho al voto en el muncipio de Sucilá; la presidenta del Tribunal Superior de Justicia del Estado y del Consejo de la Judicatura, María Carolina Canto Valdés, sufragó en la casilla 364 básica, ubicada en el colegio Cristóbal Colón del Centro de Mérida.
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Mientras tanto, Patrón Laviada, líder de un municipio clave, ni siquiera se molestó en aparecer o rendir cuentas. Su silencio no sólo es opacidad: es una falta de respeto a un proceso que redefine la justicia en México.
El INE reportó lentitud en la instalación de casillas (sólo 6.15 por ciento operativas al inicio), pero la ciudadanía respondió. En La Ceiba, una mujer fue la primera en votar, a las 8:15 a.m., dedicó 10 minutos a un proceso meticuloso. Adultos mayores hicieron fila en la Primaria Justo Sierra, algunos con ayuda para agilizar su participación.
En tanto, pese a las lonas de la CNTE en escuelas como la Secundaria Técnica 75 de Caucel, los maestros en huelga no bloquearon las votaciones. Hasta quienes exigen derechos laborales entendieron la importancia de este día.
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En un recorrido amplio que este medio informativo realizó durante la jornada electoral extraordinaria, se constató que los sindicalizados de la CNTE que llevan más de un par de semanas en huelga laboral, permitieron que las votaciones transcurrieran de manera regular en las escuelas. Sin embargo, dejaron a la vista sus inconformidades en lonas y pancartas.
La Secundaria Técnica 75 de Caucel, la Secundaria Federal 2 de la Madero, la Técnica 26 de San José Tecoh, sólo por mencionar algunas, fueron los centros educativos que estuvieron abiertos de manera normal; aunque las expectativas eran distintas, el ambiente de calma confirmó que los docentes no boicotearon la elección.
Incluso, en la Primaria Justo Sierra de la colonia Castilla Cámara, por lo menos 12 adultos y personas mayores hacían fila esperando su turno para votar, mientras que en el salón habilitado para las elecciones, las seis casillas estaban completas; incluso se observó que las personas de la tercera edad eran auxiliadas para agilizar el proceso.
De esta forma, en un proceso donde hasta los más vulnerables hicieron esfuerzos por votar, la omisión de Cecilia Patrón Laviada no pasó inadvertida.
