
Con la llegada de la temporada de lluvias, también aumenta la presencia de uno de los insectos más molestos y peligrosos: el mosquito. Tradicionalmente, el primer recurso ha sido el uso de insecticidas en aerosol, pero cada vez más familias buscan opciones naturales y menos tóxicas para mantener su hogar libre de estos insectos.
Especialistas en salud ambiental y activistas ecológicos coinciden: es posible combatir a los mosquitos con métodos caseros que, además de ser más seguros, también resultan económicos y sostenibles. Aquí te compartimos algunas de las estrategias más eficaces

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✅ 1. Trampas caseras con azúcar y levadura
Una mezcla de agua, azúcar y levadura puede convertirse en una trampa letal para los mosquitos. Al fermentar, libera dióxido de carbono (CO₂), lo cual atrae a los insectos. Al entrar a la botella, los mosquitos quedan atrapados y mueren por agotamiento.
✅ 2. Uso de ventiladores
Los mosquitos son malos voladores, por lo que el simple uso de un ventilador encendido puede bastar para alejarlos o impedir que se acerquen a dormir. Además, dispersa el CO₂ que emitimos, el principal atrayente de estos insectos.
✅ 3. Plantas repelentes
La naturaleza también ofrece aliados. Plantas como la citronela, albahaca, lavanda y menta desprenden olores que repelen a los mosquitos. Tener macetas en interiores y exteriores puede reducir considerablemente su presencia.
✅ 4. Vinagre y jabón como trampa
Colocar en un recipiente vinagre de manzana con unas gotas de jabón líquido forma una trampa efectiva. El olor atrae a los mosquitos y el jabón rompe la tensión superficial, haciéndolos hundirse y morir.
✅ 5. Mallas, ropa larga y mosquiteros
Volver a lo básico también funciona. Mosquiteros en ventanas y camas, así como el uso de ropa de manga larga, son barreras físicas que reducen el riesgo de picaduras, especialmente en zonas propensas a enfermedades como dengue o zika.
🚫 ¿Por qué evitar los insecticidas?
El uso prolongado de aerosoles químicos puede generar problemas respiratorios, afectar a mascotas y niños pequeños, y contaminar el ambiente. Además, algunos estudios apuntan a una creciente resistencia de los mosquitos a ciertos compuestos, lo que hace menos efectiva su acción.