
Personas que no pudieron ser identificadas arrojaron alimentos con altas dosis de veneno cerca de unos vehículos estacionados en un callejón, lo que ocasionó la muerte masiva de perros en la privada de la calle 23, en el barrio de Konchén, situación que generó consternación entre los vecinos, ya que presenciaron cuando los canes sufrían a causa del efecto de las toxinas.

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De acuerdo con información de los testigos, los animales que ingirieron la comida contaminada comenzaron a convulsionar y a expulsar espuma por el hocico en cuestión de minutos; algunos, mientras sufrían los efectos, terminaron por retorcerse de dolor en el suelo antes de perder la vida.
Los hechos fueron reportados alrededor de las 11:00 de la mañana, a un costado de una conocida tienda de electrodomésticos, cuando algunos de los lugareños presenciaron el sufrimiento de los canes, situación que causó gran conmoción y temor, y a pesar de los esfuerzos por salvar a los animales, no fue posible.

En total, seis perros fueron envenenados, entre ellos dos cachorros; a pesar de que vecinos intentaron contrarrestar el efecto con azúcar y limón, poco pudieron hacer para salvarlos.
Los cuerpos quedaron esparcidos en diferentes puntos de la privada, reflejo del sufrimiento que padecieron antes de morir.
Algunos vecinos expresaron que quienes cometieron este acto deberán responder ante Dios y la justicia, por lo que pidieron al Ministerio Público que les aplique todo el peso de la ley.
Posterior a lo anterior, el miedo persiste en la zona, ya que hay muchos niños que transitan por las calles y existe el riesgo de que el veneno o los residuos del mismo, como la espuma expulsada por los perros, se conviertan en polvo que el viento disperse, lo que pudiera representar un peligro potencial para la salud de los menores, quienes acostumbran caminar con alimentos en la mano.
JGH