La Iglesia Católica en Ciudad del Carmen hizo un llamado a la población a mantener la fe y no dejarse vencer por la desesperación ante la difícil situación económica que enfrenta el municipio, donde muchas familias atraviesan momentos de angustia por la falta de empleo y los problemas financieros.
El titular del Decanato, José Francisco Verdejo Aguilera, reconoció que en los últimos meses ha aumentado el número de personas que acuden al templo buscando consuelo espiritual o apoyo moral, ante la incertidumbre que genera la falta de pagos por parte de las empresas y la crisis económica que ha afectado a toda la isla.
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Tras el sentir generalizado, especialmente en el sector comercial y de servicios, quienes han tenido que cerrar sus puertas ante la falta de ventas, el presbítero señaló que esto no es algo que se invente, pues muchos se han quedado sin empleo, y en consecuencia, no existe recurso ni para hacer las compras básicas del hogar como la alimentación.
“He recibido muchísimas personas que vienen a pedirle mucho a Dios para que cambie esta situación económica en nuestra isla. Todos sabemos lo que está atravesando Ciudad del Carmen ante la carencia de pagos, los despidos… por eso mucha gente ha puesto su confianza en Dios”, expresó el sacerdote.
Indicó que, desde la Iglesia Católica, se busca ofrecer fortaleza y esperanza a las familias, recordándoles que las malas rachas no son eternas y que con fe, esfuerzo personal y trabajo, es posible salir adelante.
El párroco también señaló que ha escuchado testimonios de personas que, ante la desesperación, llegan a considerar acciones negativas o ilícitas, por lo que subrayó la importancia de brindar acompañamiento espiritual y emocional a quienes se sienten sin salida.
Finalmente, el padre Verdejo Aguilera reiteró su mensaje de esperanza, asegurando que la recuperación de Ciudad del Carmen llegará con el tiempo y la cooperación de todos, pues mientras Dios nos dé salud y fuerza para trabajar, debemos levantarnos de las caídas y seguir adelante. “Independientemente de la religión, hay que recordar que existe un creador que nunca deja de auxiliarnos con su mano providente”, concluyó.
JY
