
La madrugada de este miércoles fueron incendiados dos vehículos funerarios en distintas zonas de la ciudad, en un aparente acto deliberado que ya es investigado por las autoridades. No hay personas detenidas, mientras crecen las preocupaciones por la violencia dirigida contra el sector funerario en la capital campechana.
Uno de los vehículos siniestrados, una camioneta Chrysler Town & Country con placas DHG-135-A, fue consumido por el fuego en la colonia Ulises Sansores, en la intersección de las calles 6 con 1. Cabe señalar que esta unidad ya había sido atacada a balazos el pasado 13 de marzo. Por otro lado, en la colonia Aserradero, fue incendiada una camioneta Lincoln negra, placas DFX-65888-B, también registrada en el estado.
En ambos casos, el fuego fue sofocado por personal de Protección Civil y elementos de la Secretaría de Marina – Armada de México, mientras agentes de la policía local acordonaron las zonas para preservar la escena del crimen. Según los primeros reportes, los incendios fueron provocados intencionalmente, aunque hasta el momento se desconoce el móvil de los atentados.

De manera paralela, en la colonia Lázaro Cárdenas, fue localizada una manta con amenazas dirigida al propietario de una funeraria, quien el pasado domingo 4 de mayo fue víctima de un atentado armado en el llamado camino de Nuevo León. La lona fue retirada por las autoridades poco después de su hallazgo cerca del deportivo “Las Brisas”, aunque su imagen ya circula en redes sociales.
En el mensaje, además de advertencias de que su vehículo sería incendiado, se acusa al empresario de estar vinculado con la distribución de sustancias ilegales, lo que ha encendido las alertas de seguridad en torno al caso.
Las autoridades han abierto carpetas de investigación para esclarecer los hechos, mientras ciudadanos y empresarios funerarios exigen mayores garantías de seguridad ante la creciente ola de violencia.