
La historia de Martín Anselmi es como una película de suspenso y terror donde cada vez se pone peor la situación para el protagonista, pues sus oportunidades de sobrevivir van disminuyendo conforme avanza la trama.
El guión emotivo y con un final feliz que esperaba escribir el técnico argentino al abandonar al Cruz Azul para llegar al Porto FC de Portugal está muy lejos de cumplirse, pues su estancia en el club está sostenida con alfileres.
Este fin de semana, Anselmi y sus Dragones vieron esfumarse sus posibilidades de ganar la liga portuguesa, tampoco podrán acceder a puestos de Champions League y solo aspiran a clasificarse a la Conference League, un torneo europeo para los clubes que no logran entrar a las máximas competencias.
La situación para Anselmi es muy complicada en el club y los directivos del Porto ya no lo ven con buenos ojos, no ha dado los resultados esperados, por lo que su sueño europeo podría terminar muy pronto.
Solo faltan tres jornadas para que termine el torneo local, sus próximos rivales son Moreirense, Boavista y Nacional, con los que tiene que buscar solo la victoria para aspirar a subir un puesto en la tabla general, siempre y cuando el Sporting Braga empate o pierda sus siguientes duelos.
Ante este escenario, Anselmi ya habría sido cesado o estaría en espera del final del campeonato para preparar las maletas y buscar otro destino, pero de acuerdo a información de medios portugueses, el extécnico cementero sigue en el banquillo del Porto porque despedirlo le saldría muy caro a la institución (6 millones de dólares).
Esta razón sería la única para mantener al argentino al frente de los Dragones y según el medio portugués Correio da Manha, la directiva habría decidido aguantarlo hasta el próximo Mundial de Clubes 2025, para no tener que desembolsar ese dinero.
Sería la última oportunidad de salvarse para Anselmi, donde tendría que conseguir excelentes resultados. El Porto comparte el grupo A con el Al Ahly de Egipto, Inter de Miami de Estados Unidos y el Palmeiras brasileño.