
María Elena Bergoglio, la única hermana viva del Papa Francisco, no estará presente en el funeral del pontífice en Roma.
Así lo confirmó su hijo, José Ignacio, en entrevista para Noticias Caracol, donde explicó que la familia decidió permanecer en Argentina para acompañar espiritualmente la partida del Papa.
"Creemos que lo más importante que podemos hacer hoy es acompañarlo a la distancia", expresó el sobrino de Jorge Mario Bergoglio.
Narró que la mañana del 21 de abril se enteró de la noticia por múltiples notificaciones en su celular y fue personalmente a informar a su madre, quien reside en un convento de monjas a las afueras de Buenos Aires tras sufrir un accidente cerebrovascular.

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José Ignacio destacó que, pese al dolor, María Elena, de 77 años, se encuentra serena, "abrazada a la resignación" y confiada en que su hermano descansa en paz tras haber entregado todo de sí.
El sobrino también rememoró la fortaleza del Papa Francisco, subrayando su humildad y austeridad, valores que motivaron a la familia a no realizar un costoso viaje y, en cambio, invitaron a que quienes pudieran viajar donen esos recursos a obras de caridad.
Por otra parte, Mauro Bergoglio, hijo de otro de los hermanos del Papa, sí asistirá a los funerales. Aunque inicialmente no contaba con los medios para viajar, la empresaria Rita Mattiello financió los boletos de avión y el canal argentino A24 cubrió su alojamiento y trámites documentales.
"Me partió el alma escuchar que no podía viajar", dijo Mattiello, propietaria de Corima Tours, en entrevista para El Tiempo.
Así, mientras Roma despide al pontífice en una ceremonia solemne, su familia en Argentina honra su legado con gestos de amor y solidaridad, fieles al espíritu que siempre caracterizó a Francisco.
IO