La Fiscalía General de la República (FGR) ha iniciado investigaciones dirigidas a funcionarios y agencias aduanales, tras el reciente aseguramiento de un buque que transportaba 10 millones de litros de diésel en Altamira, Tamaulipas.
El fiscal general, Alejandro Gertz Manero, informó que el buque fue detenido debido a discrepancias en la declaración fiscal de su carga.
Según Gertz Manero, la documentación presentada indicaba que el barco transportaba un material distinto al que realmente se encontraba a bordo.
"De inmediato se aseguró el barco, y ya se iniciaron las acciones contra las agencias aduanales y contra los funcionarios que hubieran permitido que bajara ese diésel", afirmó el fiscal.
Además, señaló que toda la documentación aduanal estaba falsificada, lo que complica la obtención de información precisa sobre el contenido real del buque.
Este operativo, realizado en coordinación con la Secretaría de Marina (Semar), la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y la FGR, resultó en el decomiso de 192 contenedores, 29 tractocamiones, armamento y vehículos.
Las autoridades destacaron que esta acción es resultado de trabajos de inteligencia e investigación para combatir el tráfico ilegal de combustible en el país.
El decomiso representa un golpe significativo al tráfico ilícito de hidrocarburos en México, evidenciando la colaboración entre diversas instituciones para fortalecer la seguridad y combatir actividades delictivas relacionadas con el contrabando de combustibles.
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