Ya suman tres servidores públicos que fueron separados de su cargo, dos adscritos a la Dirección de Fiscalización y una al Registro Civil, confirmaron las autoridades municipales. La decisión obedece a diversas irregularidades reportadas, en particular, por la presunta y extendida red de corrupción que desde hace años opera en el Registro Civil.
Como suele ocurrir, “el hilo se corta por lo más delgado”, mientras que el actual titular de la dependencia, Eduardo Kuyoc Rodríguez, parece mantenerse intocable, al igual que su antecesor, Marcos Basilio Saldívar, hoy regidor de la Comisión de Bienestar, Participación Ciudadana y Derechos Humanos.
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“Se está realizando la investigación, ya fueron separados de sus funciones estos servidores públicos y se lleva a cabo todo el procedimiento correspondiente”, indicaron representantes del Ayuntamiento. Agregó que “de hecho, hay un proceso legal en curso; son dos casos de Fiscalización y uno del Registro Civil, pero es el Contralor quien concentra toda la información”.
A pesar de los reportes, los expedientes abiertos y una larga cadena de abusos institucionales siguen, pues Eduardo Kuyoc Rodríguez continúa al frente del Registro Civil. La trabajadora, quien presuntamente será dada de baja, se desempeñaba como jueza de dicha área. En el 2024, al inicio del segundo periodo de Gobierno de Ana Patricia Peralta, Marcos Basilio Saldívar dejó la Dirección del Registro Civil para buscar una regiduría y en su lugar asumió Kuyoc Rodríguez.
Desde entonces, de acuerdo con testimonios internos, se habrían incrementado las prácticas irregulares, como cobros adicionales, bloqueo de trámites y la exigencia de “cuotas” a funerarias para agilizar procesos, así como pagos de hasta 50 mil pesos por la celebración de bodas fuera de los canales oficiales.
Asimismo, se señaló que las ceremonias en oficinas o a domicilio se convirtieron en un negocio, con citas programadas en domingos o por las noches para realizar trámites fuera del control administrativo. Por su parte, el Gobierno municipal insistió en que no tolerará actos de corrupción; sin embargo, las quejas presentadas apuntan reiteradamente a abusos de autoridad y prácticas indebidas.
A finales de noviembre, la jueza del Registro Civil, Martha C., fue separada de su puesto por presuntos cobros irregulares, aunque versiones internas señalan que su salida se debió a que se negó a participar en dichas conductas, por lo que fue removida para no interferir.
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JY
