Si algo ha podido demostrar la naturaleza, es que a pesar de los embates del ser humano, tiene la capacidad de resistir y de ser resiliente. En años recientes la capital yucateca ha crecido a pasos agigantados, lo que ha comprometido el patrimonio natural. Sin embargo, la fauna silvestre se abre paso en los ambientes urbanizados con el firme propósito de sobrevivir.
El pasado miércoles 2 de abril, un usuario compartió a través de redes sociales el sorprendente registro de un halcón peregrino (Falco peregrinus), considerado el animal más rápido de la Tierra, al lograr alcanzar velocidades superiores a los 300 kilómetros por hora, durante sus vuelos de caza en picada.
El ave de presa, enlistada bajo la categoría "Sujeta a Protección Especial" por la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010, fue captada luego de detenerse en una de las torres de la Catedral de San Ildefonso, en pleno corazón de la ciudad de Mérida. "Lifer en la Catedral de Mérida, halcón peregrino, primera vez que lo veo", compartió el testigo del avistamiento.
En el mundo de la observación de aves, el término "lifer", hace referencia a la primera vez que se logra observar una especie de ave, por supuesto, en el medio silvestre.
¿Es normal encontrar este tipo de aves en la ciudad?
A pesar de que podría parecer un hecho sin precedentes, la presencia de rapaces como el halcón peregrino es bastante común en sitios urbanizados. De acuerdo con la plataforma Naturalista, iniciativa impulsada por la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), en Mérida, se cuentan 27 registros oficiales de esta ave.
Se debe recordar que las ciudades representan áreas en donde proliferan roedores, palomas y otras especies consideradas como fauna nociva. Esta situación atrae a depredadores alados, quienes ocasionalmente son captados por el lente de fotógrafos apasionados.
