
Autoridades estatales han iniciado investigaciones tras dos preocupantes casos de muerte animal que evidencian posibles actos de crueldad en distintas zonas de Yucatán. El primero ocurrió al oriente de Mérida, en la colonia Miraflores II, donde un perro fue hallado sin vida en condiciones que apuntan a un posible maltrato severo. En Motul, se reportó el envenenamiento de otro can y al menos cuatro gatos, lo que ha generado alarma entre los habitantes.
Los hechos en Mérida tuvieron lugar en Circuito Colonias, entre las calles 77 y 79, cerca del estadio Carlos Iturralde Rivero. La activista en defensa de los animales Alejandra Noh Basto acudió al sitio tras recibir un reporte sobre un canino en estado crítico. Sin embargo, al llegar, encontró que el animal ya había fallecido.
Según los primeros datos, el perro presentaba lesiones visibles: heridas en la zona del recto, pérdida de pelaje en la cola y sangre en la boca. Todo apunta a que sufrió maltrato físico antes de su muerte.
Ante la gravedad del caso, Noh Basto notificó a la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), cuyos elementos acudieron al lugar y, tras confirmar el deceso, solicitaron la intervención del Servicio Veterinario Forense (Sevef) para realizar el levantamiento del cuerpo y la necropsia correspondiente.
Frente al lugar del hallazgo se encuentra un negocio con cámaras de seguridad, por lo que las autoridades ya han iniciado una investigación y solicitarán acceso a las grabaciones.
En Motul se registró otro caso alarmante: el posible envenenamiento de varios animales domésticos. El hecho ocurrió en la calle 46 entre 25 de la colonia Solidaridad, donde vecinos hallaron a un perro negro, mascota de un residente, con síntomas de intoxicación. A pesar de los intentos por auxiliarlo, el animal falleció en el lugar.
Minutos después, al menos cuatro gatos fueron encontrados en condiciones similares, lo que encendió las alarmas entre los colonos, quienes sospechan que se trata de un acto premeditado. El Sevef se trasladó también a esta zona para realizar las necropsias y analizar las posibles causas de muerte.
Vecinos hicieron un llamado a las autoridades para reforzar la vigilancia, ante el temor de que los envenenamientos sean parte de una estrategia para facilitar robos. También expresaron su preocupación por la seguridad de los niños que frecuentan las calles donde se registraron estos hechos.