
Menonitas de la comunidad La Nueva Trinidad se organizaron y unieron esfuerzos con autoridades de la Junta Municipal de Dzibalchén para rellenar decenas de baches, lo anterior sobre el deteriorado tramo del camino estatal Hopelchén–Dzibalchén, especialmente entre Pakchén y la zona arqueológica de El Tabasqueño, uno de los más peligrosos para los automovilistas.
Este martes, con palas, picos y otras herramientas, los menonitas participaron en los trabajos de reparación junto con personal de la junta municipal, aunque no emitieron comentarios.
Las labores de reparación se enfocaron en el encuadre y relleno de baches con escombro y posteriormente con asfalto en la zona cercana al entronque hacia la zona arqueológica.
Por otro lado, habitantes de la comunidad de Xkanhá también realizaron trabajos de bacheo con material rojo y escombro en el tramo Ukúm–Xkanhá–Bel-Há, parte de la vía Hopelchén–Xpujil, ante el incremento de accidentes en la zona.
Cabe mencionar que el último hecho grave ocurrió hace un mes, cuando un motociclista perdió la vida tras caer en un bache y salir proyectado hacia el monte, y aunque no se emitió un parte oficial, el hecho reforzó la urgencia de intervenir el camino.
Asimismo, hace algunas semanas pobladores y ejidatarios de Cancabchén se organizaron para reparar la carretera por los hoyancos del tramo que conecta su comunidad con el entronque Dzibalchén–Xpujil, cerca de Chunchintok, a lo cual se sumaron otros ciudadanos para mantener transitables los caminos rurales del municipio.
JY