
Durante la Semana Santa, las ventas de productos avícolas en los mercados locales no alcanzaron las expectativas, señaló Rosa del Sagrario Campos Mena, secretaria general del Sindicato de Aves de Corral.
La funcionaria también dijo que durante la semana mayor apenas se logró un 75 por ciento de las ventas esperadas, debido a que los consumidores priorizan el gasto en otros rubros como el entretenimiento y redujeron su presupuesto para el hogar.
Cuestionada sobre cómo fueron las ventas durante los días pasados, cuando la comunidad católica acostumbra a no comer carnes rojas y busca pescado, mariscos y aves, Campos Mena explicó que se habían creado grandes expectativas de lo que podría generar la Semana Santa, pero estas no se cumplieron, porque la situación refleja un desequilibrio económico generalizado, que impacta al comercio de productos avícolas y a todos los sectores que dependen del consumo diario de las familias.
“La gente fue al mercado, sí, pero más a desayunar, no fue a comprar lo necesario para preparar comida y llevar a su casa”, detalló Rosa del Sagrario.
Agregó que los tiempos han cambiado para la religión católica y sus creencias, además, la situación económica actual ha provocado que los ciudadanos busquen opciones más baratas, aunque sean menos nutritivas y no apegadas a la tradición.
“Compran medio pollo, ala, pierna… pero no el ave completa. Van dosificando lo que tienen para toda la quincena”, aseguró la secretaria sindical.
Después de la pandemia aún no terminan de componerse las cosas para los comerciantes establecidos, ya que la informalidad, así como las ventas en línea, reducen significativamente las oportunidades para los que tienen negocios en mercados o colonias, aun así, ellos siguen confiando que hay quienes sí dan valor al comercio local, pues este genera empleos y economía circulante, declaró.

También comentó que muchas familias destinaron parte de su dinero a actividades recreativas de la temporada, lo que también influyó en la baja demanda de productos básico.
"Buscaron irse de fiesta o de vacaciones, decidieron bajar el presupuesto diario para poder salir a divertirse, y eso no está mal", reconoció.
Campos Mena confía en que las siguientes festividades, como el día del niño, las madres, los maestros, mejore el panorama para el comercio establecido.