En un acto solemne y de profundo significado espiritual, la comunidad católica de la colonia Puesta del Sol conmemoró los cinco años de la elevación de la capilla San Juan Pablo II a parroquia, con una ceremonia de bendición del templo, que destaca por su arquitectura neogótica, una de las pocas con este estilo en todo el estado y que fue encabezada por el obispo de la Diócesis de Campeche, monseñor José Francisco González González.
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Acompañado por autoridades municipales, vecinos, bienhechores y miembros de la feligresía, el prelado bendijo la edificación que, desde su remodelación, ha resaltado por sus ventanas en forma de lanceta, arcos acampanados y tejados de fuertes pendientes, detalles que la convierten en un referente arquitectónico dentro de la diócesis.
Durante su mensaje, monseñor González González –quien también es arzobispo de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas– expresó su gratitud a nombre del párroco Francisco Xavier Becerra y de toda la comunidad, haciendo énfasis en el apoyo brindado por la familia García Denis, cuyo respaldo moral y económico fue fundamental para ver concretado este espacio de oración.
“Este templo simboliza la fe, el amor y la constancia. Es el reflejo tangible del verbo hecho comunidad”, expresó el arzobispo, quien tras la bendición, se realizó el tradicional corte de listón, seguido de una misa de acción de gracias, marcando también la última actividad pública del monseñor González en la Isla antes de su regreso a su nueva encomienda en Chiapas.
La Parroquia San Juan Pablo II se consolida, así, como un símbolo de identidad, fe y unidad en el suroeste carmelita, reflejo de un esfuerzo conjunto entre la Iglesia, sus fieles y quienes creen en la trascendencia espiritual de sus espacios sagrados.
Asombro y expectativa de la población:
En Ciudad del Carmen, no había ejemplos prominentes de arquitectura neogótica, puesto que predominan las influencias colonial y, en menor medida, las influencias mayas y españolas en la arquitectura. El Santuario Diocesano Mariano de Nuestra Señora del Carmen, a pesar de ser un edificio importante, no se considera neogótico, por lo que, tras la revelación de cómo iba quedando la nueva parroquia, la población alejada de esa colonia ubicada en la parte oriente de la Isla, mostraba asombro y no creían que en la Isla había un recinto religioso con ese diseño.
La arquitectura neogótica, que se popularizó entre 1830 y 1900, se caracteriza por imitar el estilo de las catedrales medievales, con elementos como arcos apuntados, vidrieras y detalles ornamentados.
JGH
