
A pesar de que el Día de las Madres es la mejor temporada de ventas para los comerciantes de flores, este 2025 llega con desafíos económicos y climáticos que afectan directamente sus ingresos. Judith del Carmen de la Cruz Martínez, florista local, compartió que el alza en precios, la menor duración del producto y los altos costos operativos están generando pérdidas.
La mañana de ayer, una camioneta repleta de flores, especialmente rosas de todos colores, se aparcó frente a la zona de florerías más antigua de Ciudad del Carmen, la calle 47. Ahí, comerciantes y trabajadores entregaban por un listado todo el pedido que hicieron, con la finalidad de empezar a armar los detalles que tendrán a la venta para la celebración del 10 de mayo.
Desde el domingo pasado, Judith y otros comerciantes se organizaron para traer flor directamente desde la Ciudad de México, buscando abaratar el flete al compartirlo entre varios. “Todo sube en estas fechas porque hay mucha demanda y poca producción; además, este año la flor llegó más delicada, está durando máximo seis o siete días en lugar de 10 a 12 como es normalmente, eso es merma para nosotros”, explicó.
Los precios al público también se dispararon. Según la comerciante, rosas en tonos rosa o lila podrían alcanzar los 100 pesos por pieza, mientras que las tradicionales rojas se cotizan en 70 pesos, muy por encima de los precios habituales que rondaban los 35 o 40 pesos.
El trabajo extra también pesa para los dueños de establecimientos con venta de flores, pues los ayudantes deben ser pagados por jornadas extendidas, y algunos cobran hasta 10 mil pesos por los cuatro días fuertes del evento, es decir, desde ayer y hasta el próximo sábado, trabajan día y noche, comen y solo se van a descansar algunas horas para atender la gran demanda.

Aun así, Judith destaca el lado emocional de esta celebración, pues indica que hay quienes valoran en vida a su madre y una flor, por muy sencilla que sea, representa un gran detalle. También hay quienes, aunque sus madres ya no están, acuden a los panteones a recordarlas, llevándoles su flor favorita.
“Es una fecha muy especial, tanto para quienes tienen a su mamá como para quienes van a visitarlas al panteón. Lo hacemos con amor. Esta es, sin duda, la temporada más fuerte en ventas para nosotros. Es cierto que la vamos a aprovechar, pero también estamos preocupados, uno por el alto costo que tiene la flor y todos los demás insumos que ocupamos para hacer los arreglos, pero también porque el calor está haciéndonos perder, porque están marchitándose pronto”, concluyó.
JY