
En un evento que causó gran expectación, el Proyecto Santa María, iniciativa dedicada a la conservación de loros silvestres y sus hábitats, reveló los primeros resultados del Programa de Monitoreo de Loros Urbanos. A lo largo de un semestre, 183 ciudadanos aportaron registros que ayudaron a entender la dinámica de estas aves en el entorno urbano.
Gracias al esfuerzo y al interés de la ciudadanía, siete especies de psitácidos fueron identificadas en distintas zonas de Mérida. Entre estas se encuentran tres que no son originarias de la región, tres más que sí cuentan con distribución natural en el estado y una más que se considera exótica e invasora.
El loro yucateco (Amazona xantholora), especie "Amenazada" según la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010 se incluye en la lista, sin embargo, al interior de la capital yucateca solo se lograron obtener entre cuatro o cinco reportes. "Es una especie que ya no se ve con mucha frecuencia en la zona urbana" comentó Vanessa Martínez García, coordinadora del proyecto.

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"Cuando hablamos con personas mayores dicen, hace años se veían muchísimo por acá, entonces como que se está moviendo, se está recorriendo", abundó la especialista. Esta ave suele frecuentar milpas, campos de acahuales o potreros de zonas rurales en donde se alimenta, además de habitar selvas bajas y medianas.
¿Qué factores amenazan al loro yucateco?
Entre los factores que amenazan a la especie, endémica de la Península de Yucatán, se encuentra la tala de árboles, los incendios forestales que provocan la destrucción de su hábitat, y la captura ilegal de ejemplares para el comercio ilegal de loros como mascotas.
Aunque la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), cataloga a esta ave bajo preocupación menor, existe clara evidencia de la disminución de sus poblaciones.