
La clínica del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (Issste) de Valladolid lleva más de 24 horas sin energía eléctrica, lo que ha puesto en jaque al personal de Salud y a los pacientes que se encuentran en el nosocomio.
El apagón ocurrió luego de una fuerte tormenta acompañada de intensas lluvias y descargas eléctricas que azotaron recientemente a Valladolid, provocando la caída de una cuchilla del sistema de energía que dejó sin luz a toda la clínica.
Al respecto, Alberto Méndez Carvajal, trabajador de la clínica, señaló que el primer reporte fue hecho en tiempo y forma, y que, según lo establecido, la CFE debería atender este tipo de fallas en un lapso de 24 horas. Sin embargo, tras realizar un segundo reporte, el personal de la paraestatal informó que existen varios casos pendientes y que próximamente resolverán el problema.
Cabe destacar que ayer se llevó a cabo una conferencia que encabezaron el gobernador Joaquín Díaz Mena y Emilia Calleja, directora general de la CFE, donde se recordó que junto con la Federación se construyen dos nuevas plantas en Mérida y Valladolid, por lo que se espera que este problema se resuelva pronto.

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La falta de luz ha dificultado gravemente la atención médica, ya que los doctores no pueden operar equipos esenciales ni ofrecer servicios adecuados. Además, la situación se ha vuelto insoportable debido al calor sofocante dentro de las instalaciones, donde no hay ventilación ni aire acondicionado, afectando a médicos, personal de enfermería y pacientes por igual.
Hasta el cierre de esta edición, el personal médico continúa laborando en condiciones precarias, y los derechohabientes esperan con incertidumbre una pronta solución.